«El adulto creativo es el niño que sobrevivió»

Imagina un chaval, de no más de seis años, fascinado con los dibujos animados que proyecta un Cinexín sobre la pared de su habitación. Pasando la película una y otra vez. Absolutamente maravillado.

Al crecer se aficionará a dibujar, a grabar pequeños cortos caseros en vídeo (como el gran partido de fútbol de los GI Joes), a devorar cine y, un poco más mayor, a tocar la batería.

Al acabar la educación secundaria ya tiene claro desde hace tiempo a qué quiere dedicarse: realización audiovisual.

Ese niño creció y ahora es, desde hace más de diez años, un profesional en la creación de contenidos audiovisuales, especialmente como editor de vídeo.

Trabajo como freelance, especializado en contenidos promocionales de la idea a la entrega (concepto, briefing, edición de vídeo, motion graphics…)

Vivo esta profesión con pasión y con el objetivo principal de plasmar en mis encargos la idea que el cliente tiene en mente. De comunicar efectivamente y dar forma a sus contenidos.

El niño sigue vivo, en algún sitio, fascinado todavía con la magia de este medio.

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